El club de los trabajadores de la bomba.
¡Hay tantas asociaciones para empleados y trabajadores, pero esta, confidencial, es sin duda la mejor! Cada mes, en un cobertizo discreto, un grupo de trabajadores se reúne alrededor de la misma pasión: ¡la de chupar la polla! Un joven trabajador hace su primera vez al encontrarse frente a una horda de hombres con grandes pollas esperando a ver cuánto vale su boca. Él va a chupar y chupar! Las pollas son largas, gruesas, deliciosas y llenas de jugo. Después del bombeo viene la savia en la boca, codiciosos, sucios y dóciles.