Un tío musculoso decide ir a la sauna para que le revienten el culo después de su entrenamiento. Está ansioso por recibir una gran polla en su agujero y actúa como una verdadera perra desde el principio. Esto atrae la atención de un hombre activo, que está encantado de metérsela con virilidad. El pasivo hace tanto ruido que los otros machos de la sauna acaban colándose en la cabina para ver cómo le ensartan. Y la cosa no acaba ahí: demasiado excitados, los otros tíos deciden montar a esta zorra todos juntos. Rodeado de pollas, el sumiso pasivo recibe una doble penetración y se convierte en el aspirador de bolas definitivo.
En las aldeas aisladas de los Estados Unidos, hay muchos granjeros y vaqueros con grandes pollas, que necesitan jugar con otros muchachos. En esos lugares remotos no hay clubes de sexo o bares gay. Entonces, algunas veces los chicos se encuentran en aparcamientos y orinales, como los retretes rústicos. Un joven camper ha oído hablar de ello y está buscando compañía. No hay nadie, solo pensando en los machos que empieza a sacudir. Y ahí, milagro: un chico llega a la cabaña de al lado, listo para jugar. Mejor: llega un tercero. Resultado: el campista tomará la polla en todos los orificios e incluso se la follará directamente en las ranuras. Muy salvaje.
¡En este misterioso almacén en el que solo los chicos calientes tienen la dirección es Suckers Paradise! Sólo se permiten hombres con las pollas más jugosas. Se reúnen allí todos los fines de semana y ponen a disposición sus pollas XXL para chupadores de garganta profunda. No hace falta decir que hay muchos voluntarios. Algunos de ellos tienen la suerte de obtener el permiso de entrada. Su misión es chupar todas esas pollas sin parar.