Spencer Reed se masturba a horcajadas sobre su motocicleta, en un lugar secreto rodeado de listones de madera tosca y revestimientos ondulados. Cree que está solo, pero hay otro tribuxo a la virilidad, Kyle King, observando desde la distancia. El revestimiento refleja la luz, tan brillante e inflexible como las pollas cubiertas de saliva de los dos hombres barbudos que se miran. Kyle sabe que va a rendirse ante este hombre de aspecto rudo y carnoso con la polla casi aterradoramente dura. Spencer empuja la cabeza de Kyle sobre su polla con una virilidad tan ruda que los labios chocan una y otra vez contra la ingle. La herramienta de apisonamiento traquetea profundamente en la garganta de Kyle. Se retira sólo para escupir más saliva en el enorme palo de Spencer. Kyle la quiere bien resbaladiza cuando Spencer se la mete salvajemente por el culo. Kyle nunca ha sido tan feroz en su demanda de ser follado, y Spencer aprovecha cada ventaja. La polla ancha de Spencer estira el culo de Kyle tanto como un túnel a través de una montaña, y te sorprenderá ver cómo se mantiene abierto cuando Reed lo saca. Sólo para sumergirse profundamente y con virilidad en el interior, pinchando y moliendo hasta que los motores de los chicos están tan sobrecalentados que su esperma caliente salpica sus cuerpos.