Un joven empresario recibe la visita sorpresa de uno de sus empleados. El chico no está muy ocupado en el trabajo y ha venido a pedirle algunas tareas más para mantenerse ocupado. Su jefe decide ponerle a prueba y ver si es capaz de gestionar un nuevo tipo de trabajo: hacer felices a su polla y a su culo. El abnegado empleado resulta ser un gran chupador de pollas y un follador experto. ¡Parece que un ascenso está a la vuelta de la esquina !