Es día de piernas, y el entrenador personal Jimmy Durano empieza por estirar a su cliente, Landon Mycles. Mientras Jimmy masajea las piernas gruesas y fornidas de Landon, el gran en la lycra de Jimmy se hincha. Después de su intenso entrenamiento, Landon y Jimmy no pueden resistirse a descomprimirse besándose. Landon le quita la camiseta a Jimmy, revelando su increíble y esculpido físico. Jimmy se quita la camiseta de Landon, mostrando sus increíbles pectorales. Liberando la polla de Jimmy de su spandex, Landon baja y le da a Jimmy un oral profundo e intenso. El sudor y la saliva gotean de sus cuerpos mientras se frotan. Abriendo el culo, Landon invita a Jimmy a meterle la lengua primero, y Jimmy entierra su cara en el agujero de Landon. El beso negro tiene a Landon cachondo y listo para ser follado, y Jimmy desliza su enorme polla sin cortar. La intensa follada a lo perrito hace que Landon gima y se retuerza. Al darle la vuelta, Landon se masturba la polla mientras Jimmy se la folla en la posición del misionero. Sus abdominales de tabla de lavar se ondulan mientras adulan sus cuerpos perfectos juntos. Con Jimmy aún dentro de él, Landon se corre sobre su estómago. Al sacarlo, Jimmy suelta gruesos hilos de semen que salpican el pecho de Landon.