El joven Billy, que ha sido sorprendido faltando a clase, tiene problemas con su padrastro, pero aún no lo sabe. El nuevo marido de su abuelita, que excusa su absentismo con falsas lesiones, es, por desgracia, un duro instructor de gimnasia que sabe cuándo la gente se está descuidando. Exigiendo al joven que se desnude y le deje inspeccionar su joven y terso cuerpo, no encuentra nada e insiste en que se deje caer y le dé 20... ¡YA! Obligándolo, y en el proceso mostrando que en realidad no hay nada malo, daddy Nick se excita por el poder que ejerce sobre Billy, su polla ya está dura, y su enfoque ha cambiado de castigo a algo totalmente más enérgico.