Tim está muy contento de que su colega Alex le haya invitado de vacaciones. Está claro que el tío no le mentía cuando le prometió un lugar de ensueño. Sus padres poseen una villa increíble con una piscina enorme. Vida de lujo, paraíso, relax. Pero Alex no es ningún pusilánime: invitó a Tim porque pensó que, agradecido, podría relajarse con él. Quiere que le drene todos los días. A Tim no le importa el trabajo: al fin y al cabo, es agradable tener un gran chupete en la boca mientras te bañas. Además, echar un polvo al sol es un verdadero placer. Unos chorros de semen después, las vacaciones continúan.
Atados, con los ojos vendados y sometidos a sus amos enmascarados... las desafortunadas presas son sometidas a un ataque de pitos gigantes, fosas sudorosas y cimas hambrientas ansiosas de descargar su voluntad sobre ellos. Sintiéndose mucho más afortunados una vez que se les quitan las vendas y se aflojan las cuerdas, como pronto lo serán sus agujeros del trasero, las cimas colgadas pronto están enviando sus gruesas y largas pollas por las gargantas y por el trasero, tocando poderosamente, clavándolas en el suelo para que no haya escapatoria posible... incluso si quisieran. Desde el chico blanco lechoso hasta los jóvenes peludos, nadie está a salvo de los hombres enmascarados que toman lo que quieren, consiguen lo que buscan y dejan a todos los demás cubiertos de semen, sudor y saliva, listos para que el próximo hombre venga y los use como quiera!