Estos dos chicos musculosos hicieron buenas migas en el gimnasio y uno de ellos dio el primer paso invitando a su hermano a tomar una copa. Una excusa para que estos heterosexuales jueguen con sus grandes pollas, se masturben con sus amigos y se hagan mamadas.
Los dos curiosos amigos deportistas heterosexuales siguen descubriendo el sexo gay y uno de ellos quiere probar la sodomía gay. Una primera vez intensa y emocionante. El heterosexual descubre su punto G en el culo y lo bien que se siente al recibir una gran polla.
Desde que descubrió el sexo gay este heterosexual está obsesionado. No puede pensar en otra cosa en todo el día y se pasa el tiempo pajeando su gran polla e imaginando grandes pollas en su culo masculino.
Las ganas de pajearse no se pueden controlar. Este chico guapo y musculoso está haciendo su limpieza cuando de repente siente que su gran polla pide a gritos ser pulida. Se toma un respiro y se pone una buena polla. Gran chorro gay a la vista.